Al coste de la compra ahora se prevé más gastos millonarios para la reforma del inmueble mientras no considera prioritario la apertura del ambulatorio del centro de Vila-real

El alcalde Benlloch ya dispara el coste del Gran Casino hasta unos 6 millones de euros. Al coste de comprar el edificio con el objetivo inicial de ubicar el despacho del alcalde en la calle Mayor y que costó más de dos millones, se le suman los casi dos millones en los que se ha tasado la reforma de sólo una parte, con lo que al final podría llegar a triplicar el coste.

De hecho, la reforma inicial propuesta ya alcanza los dos millones de euros y puede acabar costando hasta dos millones más, suponiendo el proyecto del Gran Casino un coste de un total de mil millones de las antiguas pesetas. Así lo ha explicado el concejal del PP en Vila-real, Jaume Llorens, quien ha lamentado que “se suban los impuestos a la vez que se llevan a cabo este tipo de gastos”.

De hecho, este coste se conoce el mismo día en que el alcalde ha asegurado que reabrir el centro de salud en el centro, después del cierre del de Torrehermosa, no es una prioridad ahora mismo. “Y justo la misma semana en que el alcalde dice que quiere comprar los terrenos de una fundación privada porque tiene problemas económicos”, ha lamentado el edil.

Benlloch, dentro de su proyecto faraónico para la ciudad ni siquiera ha sabido concretar para que quiere el edificio del Gran Casino ya que sólo la planta baja se ha anunciado en diferentes momentos que servirá para tesorería y recaudación, o para ubicar concejalías como las de turismo y congresos, o para servicios atención y trámites y proximidad o para los comerciantes de la ciudad “Y además aseguran que la reforma se hará con una subvención que todavía no han conseguido y lamentablemente presuponemos que el plan B por si no la consiguen vuelva a ser subir el IBI a todos los vecinos para pagar los caprichos del alcalde”.