La pésima gestión económica del Ayuntamiento obliga ahora a que todos los vecinos paguen con una subida de impuestos el descontrol en el gasto que ha llevado a cabo el alcalde

20,7 millones de euros recaudará en concepto de IBI el PSOE frente a los 16,6 millones de euros que se recaudaron en 2011, último año de gobierno del PP en Vila-real.

Una escalada del 25% en este impuesto municipal que convierte al alcalde Benlloch en el alcalde que más dinero recauda a los vecinos en la historia de la ciudad. Una sangría que los vecinos tienen que asumir después de que, desde 2014, el Ayuntamiento se haya hundido en un descontrol del gasto que ha acabado en esta subida de impuestos y en la aprobación de un plan económico y financiero para reconducir las cuentas municipales.

En la última legislatura que el PP gobernó Vila-real, el Ayuntamiento recaudó más de 59 millones de euros. Frente a esto, Benlloch recaudará esta legislatura casi 80 millones de euros.

El portavoz del PP en Vila-real, Héctor Folgado, ha mostrado hoy su preocupación ya que “Benlloch y Batalla están llevando a Vila-real a ser la ciudad con el mayor caos económico” puesto que “nos suben los impuestos como la contribución y, al mismo tiempo, recortan 300.000 en Servicios Sociales” por lo que el de Vila-real “se ha convertido en el más antisocial de los ayuntamientos por culta de PSOE y Compromís”.

Folgado recuerda que a este descontrol del gasto se suman decisiones más que cuestionables, como la compra del Gran Casino que prevé albergar el despacho del alcalde y que cuesta dos millones de euros. “Decisiones que van totalmente en contra de lo que desde el PP de Vila-real pensamos que es necesario”.

Para el popular, “si ellos mismos son conscientes de que la situación económica que han provocado es este caos, sería mejor plantearse si es necesario comprar un edificio para el despacho del alcalde o si es necesario comprar la casa de Llorens Poy, por ejemplo”.

Este descontrol y aumento del gasto ha hecho que ahora todos los vecinos de Vila-real tengan que pagar a escote la derrama del alcalde. “Cualquier vecino sabe que no se puede gastar más de lo que se ingresa y eso es lo que ha hecho Benlloch y, ahora, lo hemos de pagar entre todos”.